domingo, 28 de agosto de 2016

Taray de Lo Santero, Torre Pacheco

En Torre Pacheco, muy cerca de la costa murciana, nos "colamos" hoy en un patio familiar, en el que crece probablemente desde hace más de 100 años lo que en principio es un arbusto o pequeño arbolillo y que, sin embargo, desde hace mucho tiempo, tiene un gran porte arbóreo, como vemos en esta foto de hace ya 16 años:

Foto 1. Taray de lo Santero, año 2000

Este taray "Tamarix canariensis", que podría ser el de mayor perímetro de toda España es un árbol famoso, que sepamos su salto a la fama fue en el año 2000, al ser incluido en el libro Árboles Monumentales y Singulares de la Región de Murcia y Territorios Limítrofes (Carrillo et al., 2000), una de las primeras publicaciones que cataloga los árboles de la Región de Murcia y cercanías, y después de eso lo vemos aparecer en una publicación a nivel nacional, Gigantes y ancianos de los bosques españoles (Domínguez,  2009), así como en la app MiTierraMaps:



Su origen es, casi con total seguridad, natural, pero la familia de José Campillo Martínez lo ha adoptado y cuidado a su manera durante varias generaciones. Bajo sus raíces existe un pozo ciego del que medra, y recibe además agua de la pequeña huerta que hay frente a la casa, como vemos en esta foto más reciente (Foto 2), de finales de 2015. 

Foto 2. Taray de lo Santero junto a huerta de la que medra

La primera vez que hablábamos con José nos comentaba que uno de sus familiares, que murió con 103 años le decía que siempre había conocido el taray con el mismo aspecto que tiene ahora, ha sido un árbol, por tanto, querido por esta familia; de hecho, sus hijos acotaron los brazos principales en el año 1998, pues el viento de levante amenazaba con partir el tronco ya hueco.

Foto 3. Tronco hueco

La poda y fuerte desmoche al que está sometido el árbol desde hace años consigue que la vela de la copa sea muy escasa y, por tanto, el empuje del viento sobre ésta sea también reducido, circunstancia que favorece la no rotura del tronco, aunque el cercenado de las ramas principales ha generado el ahuecado del mismo por los hongos. En cualquier caso, una vez que no existen los brazos principales desde hace tiempo, resulta necesario seguir realizando podas de mantenimiento a tamaño reducido de la copa, en general, siempre con una técnica adecuada que persiga la realización de cortes del menor diámetro posible.

Foto 4. Copa con los brazos desmochados
Aquí vemos algunos detalles del tronco (fotos 5 a 8), en el que se ven clavos incrustados y otras señales de los diversos usos que se le han dado a este taray en su larga vida, así como las consecuencias de los mismos: golpes al almacenar aperos y utensilios bajo su copa. Sin embargo, pese a que lo comentado no resulta positivo para el árbol, este todavía ha sido capaz de sobrevivir. Aún así, parte del tronco está ya seco, en torno a un 30% de su arco de circunferencia, lo que indica que a medio plazo se abrirán fisuras perpendiculares al suelo, y el fuste terminará por colapsar, provocando la ruina de la estructura arbórea actual, aunque el taray podría resurgir de algún rebrote basal generando un nuevo tronco.

Fotos 5 y 6

Fotos 7  y 8
En cualquier caso, esperamos que este famoso taray resista muchos años más y nuestros descendientes puedan seguir fotografiándolo dentro de unas decenas o, tal vez, cientos de años... ¿Quién le iba a decir que acabaría siendo retratado con un teléfono?... Y es que probablemente cuando empezaron a ver el sol sus primeras ramas D. Antonio Meucci todavía no había inventado ese aparato sin el que ahora casi no podemos vivir.


Foto 9. Fotografiando detalles del tronco del taray.


FICHA BÁSICA


Especie
Tamarix canariensis
Nombre común
Taray
Nombre propio
Taray de Lo Santero
Término municipal
Torre Pacheco
Provincia
Murcia
Altitud
32  msnm
Perímetro
5,20 m
Altura
5 m
Edad aproximada
150 años
Estado de conservación
Regular
Amenazas
Si
Estatus legal
--
Plan de actuación definido
--

domingo, 14 de agosto de 2016

Tejo de El Manojal, Bogarra

Dando un paseo por nuestra querida Sierra del Segura, y casi por casualidad encontramos hace unos días este tejo "Taxus baccata", en el municipio de Bogarra.

Foto 1. Tejo de El Manojal.
En el mes de agosto, y en este luminoso día, hasta los árboles necesitan cobijarse del sol, y resulta que este tejo es chulo chulo ;-)

Foto 2. Detalle del tronco del árbol que nos invita a reflexionar
sobre el paso del tiempo en el viejo tejo.

En un tono más serio ya, observamos en la Foto 2  su sinuoso tronco en el que convive madera ya muerta, que le sirve de sostén, con otras partes vivas que el árbol utiliza, pues es necesario cuando sufre un retroceso de su copa (por rayos e incendios principalmente) que aparezcan nuevos tejidos y ramas desde la parte que ha sobrevivido y se conviertan en nuevas raíces que lo rejuvenecen y lo hacen cuasi inmortal.

Foto 3. Madera muerta y viva en perfecta convivencia.

Con un perímetro de tronco de 4,80 m, y haciendo caso a la bibliografía (Cortés et al., 2000) estaríamos ante un árbol que podría tener una edad cercana a los 1.800 años, en cualquier caso,  estas dataciones han de tomarse siempre con cierta precaución, pues siempre hay que considerar factores concretos de ecología y ubicación donde se encuentra el tejo.

Foto 4. Anotando perímetro y altura, entre otros datos.

En la Foto 5 más detalles de ese mágico tronco, así como de los rebrotes, como ya sabemos, debido a su toxicidad tiene pocos enemigos el tejo, pero las cabras son inmunes y todos los que encontramos en la sierra están bastante ramoneados en sus zonas basales, produciendo todo un tapiz de pequeñas hojas literalmente pegadas al tronco en la mayor parte de las zonas donde éste cuenta con corteza viva.

Foto 5. Rebrotes de hojas en base del tronco intensamente ramoneados por cabras.

En nuestro camino hacia el árbol nos encontramos otra planta mágica, sobre todo en el País Vasco y Navarra, donde es colocada en las puertas de las casas a modo de talismán benefactor que protege contra rayos y brujas, este uso no parece haber sido recogido en la comarca segureña, donde sí que se recoge su empleo para aromatizar la mistela. También el ilustrado Simón de Rojas Clemente que estuvo en Huéscar en 1805, recoge en su obra "Viaje a Andalucía: Historia natural de reino de Granada (1804- 1809)" un uso que en la comarca de La Sagra realizan sus habitantes, así menciona literalmente: “El cura de las Santas se llama Don Canuto Mario Fernández, que debe enviarme la anacarnina, planta que sólo se cría en Cañada Longuilla, tras Mirabete, Jurisdicción de Huéscar, cuya raíz usan comida cruda y molida, tomando con agua sus polvos para curar calenturas

Foto 6. Cardencha o cardo dorado, Carlina acanthifolia subsp. cynara.
Dejamos a nuestro tejo dominando la ladera, y acompañado a lo lejos por otro de su misma especie, a unos 20 metros del término de Riópar, justo bajo el roquedo conformado por calizas y dolomías, en un paraje en el que llevan siglos viviendo y en el que esperamos que esa capacidad suya para la regeneración les permita seguir creciendo unos cuantos siglos más.

Foto 7.  Panorámica con el tejo en el centro de la imagen y su compañero a su derecha en la misma base del roquedo.


Respecto a usos locales en la Sierra del Segura, uno de los más curiosos lo recogen Jorge Escudero  y Antonio Manzanares en su obra  "La Naturaleza en Riópar" (2012), consistía en usar una astilla de tejo verde para introducirla en un taladro realizado en un árbol y que éste se secara, de este modo los vecinos se vengaban unos de otros cuando eran malavenidos. 

Foto 8. Tejo ubicado a 60 metros al sur del protagonista de la presente entrada.
FICHA BÁSICA

Especie
Taxus baccata
Nombre común
Tejo
Nombre propio
Tejo de El Manojal
Término municipal
Bogarra
Provincia
Albacete
Altitud
1484 msnm
Perímetro
4,80 m
Altura
9,75 m
Edad aproximada
1.800 años (Cortés et al., 2000)
Estado de conservación
Regular
Amenazas
Si
Estatus legal
--
Plan de actuación definido
--